Había una vez una familia de osos que le querían enseñar a ser un oso verdadero al más pequeño del grupo. Al oso no le gustaba nada cazar animales pero hacia por que lo obligaban.
Un día que se escapó de la casa, no estaba en ningún lugar. Los papas se habían desesperado. El papá dijo talvez esta en el bosques o esta cerca del rio.
Mientras tanto, el osito estaba en el rio un poco muerto de miedo. De pronto aparece un tucán y le dice "¡No me comas!". El osito le dice que no se asuste, que era bueno y estaba escapando de su familia. También le cuenta que no le gusta ser un oso de verdad porque el disfruta de otras cosas y no de cazar. El tucán, sorprendido por la reacción del animal, le dijo que no se preocupe porque él podía ser un oso diferente.
Desde ese día, el oso decidió no seguir más las ordenes de su familia y ser libre de elegir.